Como hemos visto en clase, el metrónomo es el aparato que se utiliza para medir la velocidad con la que ha de tocarse una partitura. Fue inventado en 1812 por el holandés Winkel, pero fue su compatriota Mälzael lo registró a su nombre cuatro años después: consistía en un péndulo con una polea regulable para conseguir una velocidad más rápida o más lenta. El primer compositor que indicó en sus partituras la velocidad a la que habría que poner el metrónomo fue Beethoven.
Los metrónomos actuales son electrónicos.
Hay un experimento muy curioso relacionado con el metrónomo. ¿Crees que sería posible sincronizar metrónomos que empezaran en distinta fase? Pues aunque no lo parezca, es posible. Este vídeo te muestra cómo hacerlo con ¡cinco metrónomos! Si quieres ampliar la información sobre este experimento y, además, conocer una interpretación como metáfora de la relación de las personas con la sociedad en la que vivimos pincha aquí.